Costa Rica es uno de los países especialmente recomendados para viajar con niños, si te gusta la naturaleza, es 10 veces más pequeño que España -cubre el 0,1% de la superficie terrestre del planeta- pero contiene el 6% de la biodiversidad mundial. Hay 238 especies de mamíferos, 2.000 plantas, 2.400 especies de mariposas y 857 especies de aves, además de 66.800 especies de insectos, 182 especies de anfibios, 225 especies de reptiles y 6.778 especies de vida marina. Entre ellos, podrás ver pájaros carpinteros, perezosos, tortugas, ranas verdes de ojos rojos o fascinantes quetzales. No hay duda: un paraíso, especialmente para los niños. Además, Costa Rica es un país con una población muy amable, para quienes las sonrisas son la norma, los Ticos son tranquilos, amigables y divertidos.
Al viajar con niños en Costa Rica, te darás cuenta de lo bien recibidos que sois. Además, por su personalidad, los costarricenses siempre intentan ayudarte en todo lo que pueden. La conexión con la naturaleza en este viaje familiar es perpetua. Estás remando entre los manglares del Bosque de Tortuguero; En el Volcán Arenal, puedes bañarte bajo cascadas o en aguas termales calentadas directamente por el calor del volcán; En el camino, hay increíbles vistas del paisaje… los niños aprecian que, si son pequeños, se alegran por tener espacio para correr, jugar y explorar. Y si son un poco mayores, conocerán la rica y diversa flora y fauna de Costa Rica. Adicionalmente, Costa Rica ofrece una gama de valores ambientales que son difíciles de encontrar en cualquier otro lugar del planeta. Viven entre volcanes, bosques y ríos, respetando sus tiempos y sus personalidades. Se realizan visitas a lugares nativos donde vemos o no vemos animales según nuestra suerte; En la mayoría de los casos, no se entrometa ni los moleste. Fauna sin fin. En Costa Rica diferentes especies te acompañan durante todo el viaje y se transforman todos los días: perezosos, colibríes, monos, mariposas, renacuajos, iguanas y hasta mapaches y gavilanes si los incluyes. Te recomendamos que vayas con un guía profesional para disfrutar al máximo de tus excursiones, porque los animales están en su propio hábitat. Aunque son difíciles de encontrar para nuestros ojos, los guías los descubrirán primero y nos ayudarán a verlos, ofreciendo una fuente ilimitada de información y conversaciones para niños.
La visita al Parque Nacional Volcán Arenal se convierte en una verdadera lección de geología, en uno de los parques más visitados del país ya que ofrece a los visitantes unas vacaciones llenas de actividades y paisajes. Para ir con niños es muy recomendable una excursión a la cascada del río Fortuna. Después de caminar por los senderos de la selva tropical donde podrás ver diferentes animales, llegarás a esta cascada de sesenta metros de altura donde podrás disfrutar de un refrescante baño. Por supuesto, la actividad principal del Volcán Arenal es bañarse en las aguas termales del volcán. El volcán Arenal también permite muchas rutas de senderismo para disfrutar del volcán cerca de Sendero de los Tucanes, Mirador 1968 o Senderos del Silencio. Todos ellos aportan algo especial y diferente y te permiten presenciar una variedad de vida silvestre y formaciones de lava. El Volcán Poás es uno de los lugares imperdibles cuando se viaja a Costa Rica con niños, aunque sea solo una parada en el camino. Ubicado en medio de un impresionante paisaje tropical, permite una verdadera lección de geología al permitir que el cráter activo se vea desde un punto que lo domina. Absolutamente maravilloso
Recorrer los canales del Parque Nacional Tortuguero en botes desde el Muelle de La Pavona hasta los hoteles indica que en este parque puedes sumergirte en la naturaleza. En Tortuguero los hoteles son pequeños ubicados en medio del bosque. Y nada se compara con despertarse a las cinco de la mañana con los gritos de los monos aulladores. Habiendo estado en el bote, durante el viaje, los viajeros observaron aves, cocodrilos y monos de varias especies. Una actividad que merece la pena vivir con los más pequeños. Si viajas de julio a octubre, una de las noches trae el plato principal en una escena emocionante: lo que parecían cantos rodados en una playa iluminada por la luna eran en realidad tortugas que avanzaban poco a poco hasta encontrar un lugar donde cavar hoyos para poner sus huevos.
Monteverde también ofrece la oportunidad de viajar en los famosos zepelines de Costa Rica, muchos de los cuales pasan por alto la estación de lluvia de Monteverde: pero ¿qué ofrece este rincón de las selvas tropicales y la humedad constante de Costa Rica? Difícil de encontrar en ningún otro lugar. Esta reserva biológica está ubicada en las montañas de Tilarán y ofrece dos aspectos destacados de un viaje a Costa Rica: el canopy y los puentes colgantes. El primero aporta una dosis elevada de adrenalina y es apto para niños a partir de los 4 años. La seguridad es absoluta en dieciséis saltos, en el rango de cien metros a un kilómetro. Un paseo por los puentes colgantes da una idea de las dimensiones de esta selva tropical y es imprescindible cuando se viaja a Costa Rica con niños. Además, ofrece increíbles vistas de las alturas, así como la posibilidad de caminar en el bosque por un sendero cómodo para todos.
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